Después de muchas dudas de si hacerlo ahora o esperar a Julio nos decidimos, como casi siempre a última hora, a llevar a cabo la ruta de unos pocos días que teníamos ganas de hacer por Navarra y Huesca, con pequeñas incursiones en Francia, para disfrutar de los Pirineos por sus dos vertientes.
Así, después de mucho navegar por internet buscando sugerencias de lugares para visitar y sobre todo carreteras de las que te hacen recordar cada vez que sales a recorrerlas lo placentero que puede ser viajar en moto , preparamos la ruta con tres días de recorridos que han resultado en un porcentaje muy alto, un acierto, y otros dos días de ida y su correspondiente regreso a casa en Madrid.
Con todo apunto y teniendo en cuenta las previsiones de tiempo para los primeros días, partimos de Madrid con destino a Pamplona con 422 kms por delante y no demasiadas paradas.
Como siempre intentamos evitar en lo posible las autovías y para ello elegimos la ruta que figura más abajo, con parada para comer en Logroño, visita a Estella (famosa por haber sido la sede de la corte de Carlos VII en la tercera guerra Carlista, y más recientemente, por los famosos Pactos de Estella en 1998 donde los partidos nacionalistas vascos plantean el objetivo de la autodeterminación, y el dialogo con ETA) y llegada final a Pamplona,donde nos aguardarían gratas sospresas.
Hasta Logroño, salvo el frío que llegamos a pasar en algún momento nada que destacar.
Ya en Logroño la moto nos dió el primer y único susto del viaje (es casi ya una tradición que nos pase algo) consistente en no arrancar después de calarse maniobrando para aparcar en la zona antigua de la ciudad.
Decidimos ir a comer, animarnos y luego, en su caso, llamar a la grúa y fue una buena decisión. Tras callejear degustando magníficos pinchos y tapas en una ciudad donde las despedidas de soltero se habían puesto todas de acuerdo para hacerlas el mismo día, regresamos a la moto que sin más arrancó y no volvió a dar problemas.
Paramos, como ya he dicho antes en Estella aprovechando que empezó a mejorar algo el tiempo y nos permitió callejear y tomar un café al sol, e incluso compramos unas cosas que el frío nos hizo necesitar en un mini DECAHTLON a la salida.
Tras esta breve parada, seguimos hasta Pamplona.
El hotel elegido fué el AC Ciudad de Pamplona, un poco retirado del centro, y fué un acierto porque sin saberlo, esa tarde-noche se celebraba la media maratón y encima, el Osasuna acababa de lograr su ascenso a primera y por ello, el casco histórico estaba que parecía que llegamos en plenos Sanfermines.
Un lujo por el ambiente en las calles, la animación en las plazas y la oportunidad de entrar en la plaza de toros casi casi por el callejón de los encierros.
Plaza de toros y meta de la maratón. |
animación en el casco histórico |
En la plaza del famosos chupinazo |
El día comenzó gris y ventoso pero nada que un buen desayuno en un sitio muy agradable cerca del hotel no pudiera arreglar.
Iniciamos la ruta por la N121-A con primer destino en el señorío de Bertiz, muy recomendable de visitar si se dispone de algo de tiempo, te gusta la naturaleza y los árboles centenarios y los paseos tranquilos.
Nosotros por no entretenernos demasiado nos limitamos a llevar a cabo la visita al denominado Jardín Histórico que recoge una abundante colección botánica de especies traídas de todas las partes del mundo.
ejemplar digno de ser "retratado" |
La residencia (no visitable) |
Allí, y antes de entrar en territorio francés, nos dirigimos a visitar Zagarramurdi y su famosa cueva escenario cinematográfico y por el proceso llevado a cabo en el año 1610 por la Inquisición, denominado el de las Brujas de Zagarramurdi.
El paraje, las carreteras por supuesto, y el pueblo , bonitos y allí en un pequeño bar en frente de la iglesia degustamos entre otros manjares una tortilla con pimientos verdes y cebolla riquísima.
La cueva, en parte me decepcionó, pero es lo que es, una cueva utilizada en tiempos por contrabandistas, en tiempos por rituales satánicos y en la prehistoria, quien sabe. Bonito el recorrido circular (aunque cansado) que te lleva hasta el puente del infierno.
Puente del infierno |
entrada a la cueva |
Zagarramurdi |
Sus dedicación a la producción de pimientos está presente en todas partes, casas, repostería, gastronomía, y artesanía.
Espelette |
Fachada adornada con pimientos rojos |
Continuamos hacia Saint Ettienne de Baigorry y desde alli en un ida y vuelta a San Juan de Pie de puerto, tan bonita como la recordaba.
San Juan de Pie de puerto |
Aunque desde allí y en pocos kilómetros nos hubiéramos situado en Roncesvalles (siguiente destino), había escogido una ruta más larga pero que a mi juicio merece y mucho la pena, y es bajando por el valle de Aldudes. Algunas imágenes creo que ayudarán a justificarlo.
Valle de Aldudes. |
Hayedo en el Bosque Quinto Real siguiendo el curso del rio Arga |
Ruinas de la antigua Real Fábrica de armas de Eugi, bajando el puerto de Urkiaga |
Llegó a contar con una "población" de 500 personas, que incluía, escuela, hospital e incluso capilla.
Se trata de un conjunto de unos 10.000 metros cuadrados y que fué destruida por los francesas en el año 1794.
Tras esta obligada parada y en un marco natural maravilloso, dirigimos nuestros pasos o mejor dicho, nuestras ruedas, hacia Roncesvalles, en vasco Orreaga , parada obligada si uno visita esta zona privilegiada e inicio en la península ibérica del denominado camino francés o tradicional del camino de Santiago..
Iglesia de la Colegiata de Roncesvalles |
Capilla de Santiago y al Fondo parte del conjunto que forma la Colegiata |
Después de un reconfortante café, pues los kilómetros desde que dejamos la Real Fábrica de Armas se caracterizaron por una continúa bajada de la temperatura que nos hizo pasar frió hasta que nos tuvimos que volver a equipar para soportarlo, continuamos hacía nuestro destino fina en Jaurrieta, en el Hotel Casa Sario, donde ya me había hospedado en mi anterior viaje a estas tierras y donde el buen trato de sus dueñas sigue siendo una nota característica del establecimiento.
Vista de Casa Sario en Jaurrieta con la Iglesia del pueblo al fondo. |
Al final una gran ruta aunque fuera para terminar a no muchos kilómetros de nuestro inicio de camino que bien podía haber terminado de nuevo en Pamplona.
Reconfortante cena en el propio hotel, de gustación de un vino ecológico de la tierra ,AZPEA de las bodegas del mismo nombre.,
3 día .hacia SOS del Rey Católico.
4día (Martes)
5 día (Miércoles)
Esas tierras nunca defraudan, Navarra es muy bella.
ResponderEliminarOs veo muy pintones con la ropa de paseo, je, je.
Bonito viaje, sí señor.
José Ramón